lunes, 8 de junio de 2020

Carta enviada por el escritor Fernando Bustos

Si bien no conozco al Rotary Club de Flores, lo siento cercano a mis afectos porque conozco el espíritu rotario. Y ese es uno de los motivos que me llevo a participar en este concurso. De no haber recibido el acompañamiento de una beca de estudios, en la década del ’80, jamás hubiese podido hacer la secundaria… y hablo de educación pública y gratuita. El programa de becas del Rotary de Villa Maipú no solo me ayudo económicamente con los viáticos, sino que además me inculcó valores, me aportó las primeras experiencias de liderazgo democrático,dentro de una organización de la sociedad civil… sin ser joven rotaract, simplemente becario, adolescente de familia vulnerada. Y me permitió descubrir mi temprana vocación periodística, a través de la dirección del magazine de la rueda de becados, haciendo de editor, diagramador, reportero y hasta fotógrafo. Experiencia que me llevo a elegir la carrera de ciencias de la comunicación en la UBA. Y sin embargo, a pesar de las dificultades para terminarla, de un joven de origen obrero, me permitió ejercer el oficio de periodista por largo tiempo.Hoy, a los 48 años, estoy haciendo la tesis para recibirme de otra carrera, en otra universidad pública, esta vez del conurbano, la UNSAM, en mi ciudad, como una revancha de la vida,ejerciendo otra vocación, que también emergió en aquellos años de la rueda de becados, aunque en ese momento no lo supiera, que es la licenciatura en gestión de organizaciones de la sociedad civil.Pero más allá de los motivos personales, quisiera agradecer al Rotary por esta iniciativa en particular desde una representación general, en carácter de cuentista. El texto que envié a
concurso fue escrito hace casi 20 años, en enero del 2001, y lo rescaté del olvido, como a tantos otros, cuando en 2016 comencé a enviar mis ficciones a concursos. Lo menciono porquea pesar de escribir desde hace más de 30 años, lo único que tengo publicado son los cuentos que fueron premiados y editados en antologías. Es decir que, con tantos años, aun no tengo libro propio, aunque si tenga novelas cortas y cuentos como para varios libros. Es muy difícil publicar. Por eso son importantes los emprendimientos de este tipo. Los concursos y plataformas de promoción, difusión y sobre todo, fomento de escritura creativa, enfocado en los artistas amateurs y en quienes anhelamos ser descubiertos por alguna editorial independiente. Todos sabemos que la literatura no es una profesión rentable… escribimos porque queremos difundir valores, fomentar el pensamiento crítico y aportar a la construcción de identidad. Y valoramos mucho aquellos espacios que nos animan a persistir con tenacidad en hacer lo que nos gusta y en seguir soñando en alcanzar nuevos lectores.
Muchas gracias Rotary Club de Flores.

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